jueves, 3 de diciembre de 2009

Lo paradógico del Bachiller Apureño

El bachiller apureño con algunas excepciones se caracteriza por ser un joven con una limitada capacidad para observar, interpretar y comprender su realidad, de conocimientos deficientes en casi todas las áreas de la ciencia formales y fácticas, con muy poca motivación hacia lo que son los estudios y una corta visión de su futuro. Además tiene grandes deficiencias en la lectura, escritura y un exiguo vocabulario, sin hábitos de estudio, carentes de principios personales y morales que rijan su comportamiento o acciones. Son el producto en muchos casos de una falsa y deficiente práctica pedagógica del sistema educativo apureño. Apoyada en términos legales por organismos que favorecen la mentira y el engaño de nuestros estudiantes, negando e irrespetando en lo más profundo el derecho que tienen nuestros jóvenes a una educación de calidad, consagrado en la Constitución Nacional de la República Bolivariana de Venezuela y en la Ley Orgánica de Educación.
El gobierno municipal y regional, así como el estado venezolano debe preocuparse más por lo que sucede en las aulas de clase, de escuelas y liceos, y tomar decisiones acertadas respecto a tristes realidades que allí suceden, colocar en el centro de agenda y de las estrategias de desarrollo a la educación, ya que la primera prioridad para el estado debe ser la formación de su gente, debe asumirla como acción indeclinable al servicio de la sociedad, para asegurar su desarrollo social, cultural, científico y tecnológico. Participando conjuntamente, con las familias en la promoción de la educación ciudadana, en el marco de los principios de equidad y justicia. Sembrar el petróleo en las escuelas debe ser la primacía del gobierno venezolano, es una forma de garantizar calidad en la formación del pueblo y su desarrollo, ya que como lo dijo nuestro libertador.”Un pueblo ignorante es un instrumento ciego de su propia destrucción”.
Se debe agregar la continua campaña que promueve violencia, prostitución, alcoholismo y transculturización, dirigida a nuestros jóvenes a través de los distintos medios de comunicación, desafiando los límites de su comportamiento en general; Sin embargo, resulta paradójico que nuestros jóvenes siguen representando la esperanza para el desarrollo de nuestro estado Apure. Además Resulta incomprensible y contradictorio la distribución de los recursos destinado a la educación venezolana, en los últimos años los sectores más numeroso y necesitados (Educación Básica, Media Diversificada y profesional), vienen recibiendo menos presupuesto y el sector menos numeroso y menos necesitado (sector superior) recibe la gran suma del situado educacional. Contrario a lo que hacen en los países desarrollado. Por lo que se puede pensar que la inversión en educación en Venezuela no obedece a ningún plan o proyecto que apunte hacia el desarrollo educativo.
En medio de esta tempestad, nuestros jóvenes estudiantes de Básica y Media Diversifica intentan construir sus sueños cada vez más difusos, porque cada día tienen menos oportunidades de alcanzar el éxito en la vida; porque la responsabilidad de su formación es una pelota caliente que se pasan los docentes, padres y/o representantes de estos jóvenes, Ministerio de Educación, la comunidad, el gobierno municipal, estadal y nacional. Mientras tanto son victima de los medios de comunicación y las malas influencias sociales, estos hacen de las suyas sacando partida fácil de nuestros ofuscados y desatendidos niños y jóvenes. A quienes devalúan, tuercen o le arrancan los pocos valores y principios, quedando a merced de una sociedad de buitres sin escrúpulos, inmoral y sin valores sociales, que cada día en una competencia decreciente y desleal, corroe con más fuerza los cimientos de su formación personal y las de su futuro como profesional.

No hay comentarios:

Publicar un comentario